martes, 24 de noviembre de 2009

ARTÍCULO:TRASTORNOS DE LA ARTICULACIÓN TEMPOROMANDIBULAR (ATM)

¿Qué son las articulaciones temporomandibulares ?


Como su nombre lo indica, las articulaciones temporomandibulares (su acrónimo en inglés es TMJ, ATM en español) son las dos articulaciones que sujetan los maxilares al cráneo. Más específicamente, son las articulaciones que se deslizan y giran en frente de cada oído y que se componen de la mandíbula (el maxilar inferior) y el hueso temporal (el lado y la base del cráneo). Cuando la mandíbula y las articulaciones están debidamente alineadas, puede producirse sin problemas la acción de los músculos, por ejemplo al masticar. Cuando estos componentes no están alineados ni sincronizados en movimiento, pueden ocurrir varios problemas.


¿Qué es el trastorno temporomandibular (TMD) ?





Los trastornos temporomandibulares son desórdenes de los músculos de la mandíbula, las articulaciones temporomandibulares y, o los nervios asociados con el dolor facial crónico. Cualquier problema que previene la función conjunta del complejo sistema de músculos, huesos y articulaciones podría resultar en el trastorno temporomandibular.


¿Qué causa el TMD?


La mayoría de los profesionales de la salud oral estarán de acuerdo en que la causa primaria de este desorden es la tensión excesiva del grupo de los músculos que controla la masticación, la deglución y el habla. Esta tensión podría ser el resultado del bruxismo (apretamiento persistente de los dientes), o de tensiones físicas o mentales. Dichos factores podrían ser la causa, en la mayoría de los casos, o agravar una condición existente de TMD.





¿Cuáles son los síntomas del TMD?


A continuación, se enumeran los síntomas más comunes de TMD. Sin embargo, cada individuo puede experimentar los síntomas de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir los siguientes:

*Incomodidad y dolor de la mandíbula (a menudo prevalece más en la mañana o en las últimas
  horas de la tarde).

*Dolores de cabeza.

*Dolor que se irradia detrás de los ojos, en el rostro, los hombros, el cuello y, o la espalda.

*Dolores de oído o sonido de campanillas (sonidos que no son originados por una infección del canal auditivo interno).

*Crujido o chasquido de la mandíbula.

*Rigidez de la mandíbula.

*Movimientos de la boca limitados.

*Dientes apretados o rechinar de dientes.


*Desgaste dental acelerado.

*Mareos.

*Sensibilidad de los dientes sin la presencia de una enfermedad oral.

*Entumecimiento o sensación de hormigueo en los dedos.


Los síntomas de TMD pueden parecerse a los de otras condiciones o problemas médicos. Consulte a un médico para el diagnóstico.



Tratamiento del TMD


El tratamiento específico del TMD será determinado por su médico o dentista basándose en lo siguiente:

-Su edad, su estado general de salud y su historia médica.


-Que tan avanzada está la enfermedad.


-Su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.


-Sus expectativas para la trayectoria de la enfermedad.


-Su opinión o preferencia.


El tratamiento podría incluir lo siguiente:


*Descanso de la articulación temporomandibular (ATM).


*Medicamentos y/o analgésicos.


*Técnicas de relajación y manejo de tensiones.


*Modificación de la conducta (para reducir o eliminar el rechinar de dientes).


*Fisioterapia.











*Aparato ortopédico o protector bucal (férula de descarga) que se colocan dentro de la boca para reducir el bruxismo.El bruxismo es el hábito involuntario de apretar y rechinar los dientes inconscientemente y afecta entre un 10 y un 20% de la población


*Mejoramiento de la postura.


*Modificación de la dieta (para hacer descansar los músculos maxilares).

*Bolsas de hielo o de agua caliente.

*Cirugía.


Categorías de Trastornos Temporomandibulares


El Instituto Nacional de Investigación Dental (National Institute of Health Research), parte de los Institutos Nacionales de la Salud (National Institutes of Health), clasifica las categorías de TMD según los siguientes criterios:

Dolor miofacial - la forma más común de TMD. Es el dolor o la incomodidad que se siente en los músculos que controlan la función maxilar, el cuello y los hombros.

Desequilibrio interno de la articulación - quiere decir la dislocación del maxilar o la descolocación de un disco, o una lesión del cóndilo (el borde redondeado del maxilar).


Enfermedad degenerativa de las articulaciones - por ejemplo la osteoporosis o artritis reumatoide en la articulación maxilar.

Una persona puede tener una o más de estas condiciones a la vez.


Fuente: Instituto Nacional de Investigación Dental (National Institute of Dental Research,USA)


Fuente: Methodist Health Care System, Houston, Tx.U.S.A.